Cómic: Reseña de " Por siempre Jamás: Protocolo Pandora" de Dave Justus y Matthew Sturges - ECC Ediciones

Aquí estamos de nuevo con una nueva reseña de cómic americano siendo en este caso un número un tanto especial al encontrarse dentro del extenso universo de Fábulas, pero tener lugar una vez finalizada su historia. Por eso, antes que nada, advertir a aquellos desprevenidos que quieran empezar a leerlo. Cuidado! Contiene spoilers de la serie regular de Fabulas y será complicado de leer si no se tiene conocimiento previo de los sucesos acontecidos en dicha serie por tema de agujeros en la trama.

Así pues, dicho esto veamos de que volumen se trata. Su título es Por siempre jamás: Desde las páginas de fábulas - El Protocolo Pandora y aunque suene muy largo este nombre, es básicamente una historia extra a lo James Bond Jr con elementos de fábulas aquí y allá. Originalmente lo publicó Vértigo y aquí se ha encargado de esta labor ECC Ediciones, quienes nos presentan un rústica de 144 páginas a color en el que encontraremos la primera historia de esta serie que ha sido guionizada por Dave Justus y Matthew Sturges, contando con los dibujos de Steve Rolston y Travis Moore.

Desde las páginas de fábulas - El Protocolo Pandora

Años después del final de fabulas nos encontramos con que la tierra ha sufrido una serie de cambios a causa de la magía, cambios que si alguien controlara y utilizara para mal, podría causar muchísimo daño. Por eso, para evitar dicha amenaza se ha creado una organización secreta, los llamados Agentes Fantasma, que incluyen en sus filas tanto mundanos como fábulas con la esperanza de que juntos puedan velar por el mundo en el que viven.

Así el cómic da comienzo con el joven Conner Lobo, hijo de Blancanieves y el Lobo feroz, quien justo entra como nuevo recluta en el momento en el que el grupo de Bo y Peter Piper han perdido a uno de sus integrantes por uno de esos "incidentes mágicos incontrolables". Claramente Connor tendrá que ocupar ese puesto como nuevo agente, aunque su juventud y ansias de destacar haga que no acabe de encajar con Peter, y menos aún cuando los envíen juntos a una supuesta misión de reconocimiento.

Esta misión, que en un principio iba a ser pan comido para los dos consistía en simplemente vigilar a unos ladrones de artefactos antiguos y volver a la base con la información, pero Connor, decidido a jugar a James Bond, decide saltarse las reglas e infiltrarse en la banda haciéndose pasar por uno de los ladrones gracias a su poder de transformación.

Esto ocasiona grandes problemas a Peter, quien tiene que ir detrás de el y salvarlo de que le corten el pescuezo. Lo único que sacan bueno de esto es que descubren el para que querían los ladrones dichos artefactos antiguos. 

Mientras tanto, la mujer de Peter, Bo Piper tiene su propia misión. El jefe, Feathertop la envía a asesinar a Jordan, una niña responsable de todo el caos en St. Louis, quien a su vez asesinó a su anterior compañero Hansel. Aunque quizás a Bo, esto de ir asesinando a niñas pequeñas por mucho que provoquen el caos, no le acaba de gustar.

Como se puede comprobar, este cómic no solamente se hace difícil de entender si antes no has leído parte de la historia de fábulas. Si no que además cuesta situarla en el tiempo, ya que sucede tras el final de la historia central. Lo bueno es que si cumples esos dos requisitos el volumen es realmente interesante y de lo mas entretenido.

Pocas veces encontramos cómics tan juveniles, con protagonistas desborganzados como Connor en el mundo fantastico de Bill Willingham. Casi podriamos decir que Jack es el único que reune esos requisitos, pero a diferencia de la historia original de fábulas, en Por Siempre Jamás, ningun personaje tiene un peso tan grande que mantener sobre sus hombros.

Aquí la frescura de sus protagonistas reside en el poco trasfondo heroico con el que cuentan, ya que aunque Peter Piper, conocido por los mundanos como el Flautista de Hamelin, sea una pieza clave de la cultura de las fábulas, tampoco es que derrotara a las ratas con espada y escudo. Nadie tiene el deber de proteger un reino, no son grandes caballeros o princesas descarriadas. No, son espías y eso ademas de molar mil, es muy divertido.

En cuanto al apartado artístico destaca por ser muy juvenil y colorido incluso en las escenas mas macabras. 

Los personajes están perfectamente bien construidos físicamente, ya sean ardillas o humanos, y eso logra que en conjunto sea realista y nuestra mente lo acepte como si fuera lo mas normal del mundo ver a un conejo vestido con traje al lado de dos humanos como si nada.

Sin embargo lo que mas llama la atención en este volumen son las escenas de transición. Me encanta aquella en la que a página completa poder ver como le presentan a Connor las instalaciones, viendo como en una simple pasarela en alto el personaje va caminando y transformándose como si fuera lo mas normal del mundo mientras el jefe lo va presentando al resto de miembros del staff.

En conclusión, este cómic claramente va dedicado a aquellos que ya conozcan y se hayan terminado el universo de Fábulas. Pocos lectores esporádicos entenderán esta trama, que aunque sencilla, se sustenta en las bases creadas por Bill Willingham. 

Sin embargo aquellos que como una servidora vengan con dicho equipaje en la espalda, podrán disfrutar plenamente de un cómic divertido, emocionante y que dará mucho juego en el futuro.