Cómic: Reseña de "Constantine: Hellblazer" vol.3 de James Tynion IV y Ming Doyle [ECC Ediciones].

Tras la nueva reestructuración del universo resurgía con el nombre de Constantine: Hellblazer el mítico personaje que desafía lo sobrenatural a base de trucos sucios y timos, quién este mes de noviembre de 2016 reaparecía en las librerías de la mano de ECC Ediciones con un tercer y último volumen que continúa intentando recobrar el antiguo espíritu de John Constantine y alejarse de la versión más suave vista en New 52, con toda una serie de historias de corte más adulto y escabroso en su haber.

Un volumen que pone punto y final a esta etapa brillante que ha logrado lo que pocos han conseguido anteriormente, recuperando a lo largo de estas tres entregas ese espíritu de cabronazo que se respiraba en el Hellblazer original. Ahora esta etapa llega a su final, y en vista al DC Rebirth, quizá esta sea la última aventura del cínico ocultista de Liverpool. Quién sabe...

Este tomo recopila los número originales USA 9 al 13 en un formato rústica que contiene 112 páginas a color, con guión de James Tynion IV y Ming Doyle y dibujo de Eryk Donovan, Riley Rossmo y Travel Foreman.

Nueva York Perdida.

John Constantine está desesperado. Tras haberse enfrentado de cara - no por su propia voluntad - con Nerón, tanto él como Papa Midnite terminan encerrados en el mismísimo Infierno, dónde una y otra vez son torturados y ultrajados a la espera de que cedan sus almas a sus captores.

Por suerte para ellos, el viejo John conoce gente hasta en el averno, y pronto reciben la intervención de Blythe, a quién ya conocimos en números anteriores cuando básicamente Constantine la desterró a este lugar de una manera poco amable.

Gracias a esta invitada especial, tanto él como Papa se abrirán paso a través de la ciudad infernal hasta que los dos acompañantes terminen aprendiendo, una vez más, que John es un ser despreciable en quién no se puede confiar.

Dispuesto a rescatar a Oliver de las garras de Papa Midnite, John se dirige a su antro y libera al musculado caballero que en estos momentos es algo parecido a su pareja, solo para descubrir que este tiene una descendencia de dos preciosas hijas.

Asustado ante las ataduras que esto supone y dándose cuenta de todo el mal que puede aportarle, John decidirá cerrarse en banda frente a Oliver, solo para después descubrir que su fuga del Infierno ha tenido terribles consecuencias: Ahora Nerón, Midnite y Blythe han llegado a un pacto, del que se valen para neutralizar por completo toda posibilidad de John de quitar el poder que ahora Nerón ejerce sobre la ciudad de Nueva York.

Cogido totalmente por sus partes nobles, Constantine marcha a los Ángeles a buscar al ayuda de los emplumados para liberar la Gran Manzana, pero solo recibe las negativas de los snobs.

Rechazado y desesperado, Constantine se verá arrastrado de nuevo a Manhattan por Deadman, y deberá echar mano de todo su ingenio y toda su despreciable personalidad para darle una vuelta de tortilla a la situación.

James Tynion IV nos presenta sin tapujos en este final al viejo Constantine, un tipo despreciable, traicionero y, en general, lo peor que puede ofrecer la humanidad, algo a lo que llega de sobras en estas páginas en las que John nos ofrece lo peor de lo peor, mostrando como si algo puede salir mal, él es un maestro en arruinar vidas. Toda una esencia que casi había desaparecido del panorama, y que podemos disfrutar en todo su esplendor de nuevo con un final que no decepcionará a nadie.

En cuanto al apartado gráfico, Eryk Donovan, Riley Rossmo y Travel Foreman nos brindan un arte que se aleja muchísimo de los visto en la anterior colección para optar por algo mucho más indie y cercano a las colecciones de Vértigo de lo mostrado recientemente.

Algo que desde luego, le pega mucho más al viejo Constantine.