Cine: Reseña de "Vaiana (Moana)" de Disney

La Navidad ha llegado con todo su esplendor y aunque en la mayoría de las películas nos lo vendan como que la Navidad perfecta es la teñida de blanco, realmente la nieve pocas veces llega a la ciudad. Sin embargo lo que si se repite todos los años son los villancicos y el siempre presente éxito Disney con el que llevar a los niños a las grandes salas. En esta ocasión es Vaiana (Moana) la que se presenta al palmaré cinematográfico y aunque muchos la tachen de princesa Disney ella se encargará de demostrar lo contrario

La película que llegó a los cines el pasado 2 de diciembre nos prometía una divertida aventura con una duración de 1h 47min la cual estaba dirigida por Ron Clements y John Musker, directores de La sirenita (1989), Aladdin (1992), Hércules (1997) o Tiana y el sapo (2009). Entre el elenco de actores protagonistas destacan el carismático Dwayne Johnson quien le pone voz al semidiós Maui y Auli'i Cravalho, la protagonista del filme que se estrena poniendo voz a Vaiana.

Curiosamente el nombre de la película se ha tenido que cambiar en algunos países por problemas de licencia teniendo que modificar el nombre original de la protagonista, Moana, que en polinesio significa gran ola, para pasar a adaptarlo como Vaiana, surco de agua que nace de las rocas. Por suerte eso no ha modificado la calidad de la película, que ya está nominada a los Globos de Oro, los Critics Choice Awards y los Satellite Awards a  Mejor largometraje de animación.



Vaiana:
La historia nos pone como escenario la zona de la Polinesia, dónde hace miles de años se dice que se crearon las islas gracias a la diosa Te Fiti, la isla madre portadora de vida. Estas fueron habitadas por los humanos quienes con los años se convirtieron en increíbles marineros capaces de atravesar el océano Pacífico buscando nuevas islas.

Pero un día, el semidios Maui, cargando su anzuelo gigante que le confería habilidades meta morfas decidió robarle a Te Fiti su piedra con la que crea vida e islas provocando que desde la isla madre naciera la oscuridad, que se fue extendiendo a lo largo y ancho del océano destruyendo la vida a su paso.

Junto a la oscuridad también nació del océano un ser gigante hecho de lava, Te Ka, que derribó a Maui lanzado le al océano y dejando desperdigados en este al semidios, el anzuelo y la piedra.

De eso hace ya millones de años y desde entonces en las islas siempre se ha vivido tranquilo, sin necesidad de cruzar más allá del arrecife que les protege. Y es en una de estas islas donde vive la protagonista de esta historia, Vaiana, hija del jefe del pueblo y quien debe heredar las costumbres de su pueblo para en un futuro seguir con la tradición.

Pero Vaina sabe que por mucho que desee hacer feliz a su pueblo, por mucho que se esfuerce en seguir las tradiciones y en agradar a su padre, ella es un espíritu libre que es atraído por el mar. Este le llama a gritos y aunque intenta hacer oídos sordos para ser una buena líder siempre siente deseo de zambullirse en sus aguas e ir a explorar más allá de arrecife

Pero todo cambia cuando de la noche a la mañana la oscuridad llega a la isla, pudriendo la comida, matando a los peces y en conclusión desafiando con su presencia la paz que siempre ha reinado. Es en este momento en el que la joven Vaiana desobedecerá a sus padres y haciendo caso de los consejos de su anciana abuela se saltará la prohibición de mantenerse dentro del arrecife de coral y se lanzará a los confines del océano para buscar la solución.

Por suerte nuestra protagonista no estará sola en este viaje, desde el principio estará acompañada de su inseparable amigo el gallo heihei y en su camino se encontrará con el semidiós Maui, marchando los tres juntos en una misión en la que atravesaran el océano, se enfrentarán a temibles piratas y monstruos y que no sólo sera importante para la isla de Vaiana, si no también para muchos mas.


Crítica:
Nuevamente Disney vuelve a triunfar demostrando que sus protagonistas femeninas son tan fuertes como lo sea su convicción. Una característica clásica de las protagonistas de esta franquicia es que están movidas por el amor, no sólo sentimentalmente hablando, si no también por el amor a su país, sus raíces o su familia, y en el caso de Viana es por el amor a los suyos y a la naturaleza que la rodea.

Pero como hemos podido ver en las últimas películas, nuestras princesas ya no buscan el amor de un príncipe, ahora siguen su destino y sus orígenes, siendo llamadas por la naturaleza, buscando las respuestas a sus preguntas y enfrentándose ellas a sus miedos. Así pues, el que tachen a la división de Disney de repetir siempre el mismo tipo de mujer bien podría considerarse por estrechez de miras ya que en cada nueva edición los personajes varían, se crean subtramas y dejan de ser lo mimo se siempre para convertirse en algo nuevo.


En el caso de Vaiana, la protagonista destaca por su carácter rebelde, por lo
mucho que ama sus raíces y por su ferviente deseo de ayudar a su pueblo, tanto que llega  desobedecer a sus padres a los que adora por convicción y seguridad de ser capaz de encontrar la respuesta.

Se nota en ella pues ciertos matices rebeldes que se pudieron ver en el personaje de Mulan mezclados con el espíritu indomable de Mérida o las ganas de explorar de Ariel. Aunque no es de extrañar ya que al menos éstas dos últimas películas fueron creadas por los mismos autores que ahora firman esta última.

Eso si, se nota las influencias de otros estudios de animación en este filme, desde el estilo de animación un tanto Pixar, compañía que se unió a Disney en 2006 y gracias a la cual cuentan con la colaboración cómo productor ejecutivo de John Lasseter.  Como el amor por la naturaleza y el hecho de que esta consiga forma antropomórfica, algo muy Ghibli.


Pero la película de Vaiana no sólo cuenta con esta como protagonista, si bien gran parte del argumento es sobre el paso a la madurez de esta joven también tiene otros personajes memorables que nos entretendrán a lo largo de la película, siendo sobretodo Maui quien se lleve las grandes ovaciones.

Y es que este personaje interpretado por Dwayne Jonson se lleva todas las críticas positivas, es un héroe torpe, el clásico bruto que espera le adoren como el macho de la manada, sin embargo no tardará en valorar a Vaina cómo lo que es, una mujer fuerte, valiente y en la que confiar. Será él quien la guíe en su camino, una mezcla del sátiro Fil de Hércules y divertido como el genio de aladín. Además sus tatuajes, los cuales se mueven, nos harán soltar más de una carcajada

Y como toda buena película Disney, esta cuenta también con una graciosa mascota, el pollo Hei Hei, el cual claramente está tocado de la cabeza, además de un buen montón de villanos divertidos como el cangrejo cantante y los pirata cocos, clara referencia a Mad Max.


Arte y sonido:
Desde un principio se sabía que esta película contaría con todo un despliegue visual, pero la verdad es que es sorprendente el nivel de detalle que abarca y lo vivos que vuelve los colores y las formas teniendo como telón de fondo los paisajes de la Polinesia. Se nota que los autores viajaron por Tahití, Samoa o Fiji y aunque el concepto original, que en un principio giraba en torno a Maui posteriormente se cambiara, se percibe claramente que se empaparon de su cultura y detalles plasmándolos en los personajes, el vestuario e incluso los movimientos del agua.

Y es que los niveles de detalle con los que cuenta la animación son realmente magníficos, el pelo de la protagonista parece real, así como el agua y sus paisajes. En contrapunto tenemos los personajes humorísticos, sobretodo Maui cuyos tatuajes han sido realizados con animación tradicional y que pese al cambio encajan perfectamente con el ambiente de la película.

Finalmente, en el apartado musical contamos con la maestría de Lin-Manuel Miranda orgulloso poseedor de varios premios Tony y un Pulitzer. Es el quien nos trae en pleno invierno los ritmos de la Polinesia junto con el pop más actual y hace un guiño al entorno real de su protagonista incluyendo una canción en el idioma original de las islas.

Esta es sin embargo la única pega de la película, ya que aunque cuenta con canciones muy bonitas y divertidas, la mayoría de ellas se olvidan una vez abandonar la sala se cine, quedando únicamente para el recuerdo la canción, como no de Maui, titulada your welcome.


Conclusión:
Con esta película Disney marca en su lista la número 56, una que aunque difícilmente llegue a batir tantos récords como su anterior éxito frozen, si que gustará tanto a grandes como a pequeños.

Ahora sólo queda esperar el verdadero veredicto de los jueces más pequeños, los niños, quienes dictaminaran si esta se queda en la estantería de sus pelis favoritas