Cómic: Reseña de "Camelot 3000" (Mike W. Barr/Brian Bolland) [ECC Ediciones].

Una reseña de Francisco José Arcos Serrano

Mike W. Barr (Batman: El Caballero Oscuro — La leyenda de Ra’s al Ghul) y Brian Bolland (Batman: La broma asesina) nos trasladan al año 3000 para demostrar la atemporalidad de las leyendas artúricas.

ECC recupera de nuevo este título (que data del año 1982), en un precioso tomo en cartoné repleto de extras (introducción del propio guionista y creador Mike Barr, bocetos, fotografías, diseños….), que al menos debe ser leída una vez en la vida por cualquier amante del noveno arte que se precie.

Camelot 3000 fue una obra importante en su momento ya que se adelantó en ciertos conceptos y en el tratamiento de algunos temas un tanto polémicos para esa época. Suerte que al estar libre del control del Comic Code podemos ver una escena lésbica (que si no recuerdo mal es la primera vez que esto ocurría en un cómic del sello DC), así que imaginaos la polémica que eso pudo causar en los círculos más cerrados.

Releyendo de nuevo esta obra tras muchísimos años sin acordarme prácticamente de ella, puedo asegurar que aún conserva ese regusto clásico que gusta cuando uno se adentra en este tipo de género, y más si contamos con el excelente arte de Brian Bolland (sin lugar a dudas uno de los mejores dibujantes británicos de la historia), detalle que indudablemente resalta el producto final, convirtiéndolo en el reclamo que engancha desde el mismo inicio al posible comprador, una vez que sostiene este ejemplar en su librería favorita.

Una de las cosas que más me sigue interesando de la historia es la adaptación tan libre que hace Mike Barr de los Caballeros convirtiendo por ejemplo a Sir Percival en un gigante o a Sir Galahad en un Samurai, realizando así un meritorio trabajo de caracterización que entronca a la perfección con este mundo repleto de alienígenas, mundos devastados y, por supuesto, magia.

Es una obra que quizás haya envejecido un poco mal debido sobre todo a ese mundo de ciencia ficción que en ella se nos muestra, el cual ha quedado ligeramente obsoleto. Todo esto se traduce en que esta historia es hija de su tiempo y hay que enclavarla en su época justa para poder entender las ramificaciones que de aquí se desprenden (no hay que olvidar que esta obra tiene más de treinta años…).

En definitiva: Camelot 3000 es un título de aventuras muy divertido y audaz que mezcla elementos clave de diversos géneros dando lugar a una historia que se lee prácticamente sola y que desde aquí recomiendo a aquellos lectores que la desconozcan: quizás se lleven una grata sorpresa, quién sabe.