Cómic: reseña de "Funeral" [Drakul Ediciones].

Como parte de sus novedades para el Salón del Cómic de 2012, Drakul Ediciones presentaba en abril de aquel año bajo su sello Likantro "Funeral", fruto de los guiones de H. Ceferino López y el argentino Emilio Balcarce, ganador del premio El Eternauta, contando además con el característico arte gráfico del artista Jok.

Con un formato en rústica de 48 páginas a todo color, la editorial nos presentaba una historia de ciencia ficción que ni corta ni perezosa desafía a los grandes clásicos de la misma como puede ser Stargate o la reciente Prometheus; una historia completa, corta y bien orquestada que puede ser disfrutada por una gran variedad del lectores.

La historia nos sitúa en la época actual, cuando de repente se detecta un objeto cilíndrico entrando en el sistema solar a toda velocidad en un vector que lo dirige directamente contra la tierra.
Estimando una amenaza diez veces superior a la que exterminó a los dinosaurios hace 65 millones de años, la humanidad trata de impedir su avance de todas las formas posibles. Pero todas fracasan.

En vista del panorama, el caos invade a las masas que, a la espera del fin del mundo pierde el control. O eso parece hasta que de repente el cilindro detiene su avance y se posa sobre el océano atlántico. Tras varios tsunamis que se cobran un buen número de víctimas, la amenaza cesa y los militares se acercan rápidamente para comprobar de que se trata, hallando una suerte de nave espacial en el lugar.
O más concretamente, un sarcófago gigante.

Ante el descubrimiento los entendidos contactan con el arqueólogo Agustín Feder, quien en ese momento y a la espera del fin de los días se alegra felizmente fornicando con su voluptuosa ayudante Rebeca. Al recibir la noticia, ambos se trasladan hasta el féretro, que al abrirse muestra un gigantesco cuerpo homínido de piel azulada.

El cuerpo se revela como el de un Dios, un ser perteneciente a una raza alienígena que se dedica a sembrar la vida en mundos y cuidarla. Un ser que, tras haber fallecido, ha sido enviado a la tierra junto a sus creaciones para recibir su funeral.

Contrarios a creerse semejante historia, los militares echan mano a Feder debido a su fama tras haber desenmascarado algunos milagros que resultaron ser una patraña.

Feder pone sus servicios a cargo de esta investigación, encargándose de traducir los jeroglíficos mezcla de mayas y egipcios que cubren la peculiar construcción alienígena, en la búsqueda de la verdad que rodea al artefacto.

Una investigación que pronto se convertirá en el propio fin del mundo cuando liberen peligros más allá de sus posibilidades...

Con un inicio como este, la calidad de la historia se encuentra asegurada; los autores se lanzan a la creación de un tipo de historia que ya hemos visto en varias ocasiones en otras leyendas de la ciencia ficción, en las que el misterio del universo, la tecnología alienígena y las religiones han ido de la mano.

Unos ingredientes que se utilizan una y otra vez pero que, por suerte, en esta ocasión se encuentran libres de las típicas lagunas argumentales que suelen acompañarles. La historia de Funeral muestra solidez, abarcando los elementos necesarios sin complicarse demasiado, pero a la vez logrando un resultado más que excelente y sin grandes pretensiones, enfocándose en entretener a sus lectores sin plantearles complicados argumentos que muchas veces no van a ningún lugar.

Funeral es directo, claro y conciso, planteando claramente la naturaleza alienigena de nuestro creador como foco de una historia que avanza de forma trepidante y llena de acción, orquestada por una serie de personajes arquetípicos que van desde el arqueólogo gafotas que termina sabiéndose defender como un ninja al militar obsesionado con la amenaza alien, dándonos alguna divertida sorpresa como lo es la científica guarrona que parece escapada de una película pornográfica, y con al que será imposible no sacar una sonrisa.

Una historia que comienza y concluye sin altibajos, que además viene en compañía de un dibujo que, aunque quizá al principio puede no convencer a aquellos que buscan realismo en los trazos debido a su toque caricaturesco, terminan convenciendo de sobras a medida que avanzamos por sus páginas.
Especial mención al diseño del sarcófago, que nos tiene enamorados.

Sin duda, Funeral es una obra que da mucho más de lo que promete cuando la cogemos por primera vez, y a la que merece mucho la pena echarle una lectura.

Los autores.

Emilio Balcarce tiene una extensa carrera como autor de cómics publicando en las principales revistas de su país, Argentina, además de en Italia, Francia, España y Estados Unidos. Ha escrito más de trescientos guiones. Entre sus obras se encuentran la trilogía Crónicas del Tiempo Medio, Pantanal, Hache y R.E.M. En 1985 su guión El Extraño Juicio a Roy Ely, dibujado por Juan Giménez, se convirtió en una película para televisión: Megabit. Y en 1990 su serie Crónicas del Tiempo Medio, con Zanotto como dibujante, fue elegida por los lectores argentinos como la mejor del año, recibiendo el premio El Eternauta.

El dramaturgo H. Ceferino López se ha dedicado principalmente a escribir obras para el teatro. Funeral fue su primera incursión en el mundo del cómic.

Jok es un guionista, dibujante de cómic e ilustrador argentino. Entre sus obras se encuentran: Ecos y Tinieblas, Perfecto, Decadencia, Puerto Kapruccia, ¿Quién es Copérnico? y Carne Argentina. Como dibujante ha publicado para el mercado internacional Adventures of Bio Boy para Speak Easy (Canadá), The Hill y Vengeance of the vapor para Markosia (Inglaterra) y Redball 6 para Atomic Pop Art (Estados Unidos). Además entinta Strangeways para 62 Highway (Estados Unidos). Actualmente enseña el arte de crear cómics en La Productora, su propia escuela, y trabaja junto a Balcarce produciendo miniseries para Italia.