Ahora, recopiladas en este único volumen podemos disfrutar de la obra completa creada por el dúo formado por Antoine Ozanam y Antoine Carrion, cuya habilidad ya pudimos disfrutar en el anteriormente reseñado El Canto de los Sables.
Pero no tomemos dicha obra como referencia, ya que no podriamos estar citando un ejemplo más lejano de lo que tenemso entre manos con "La Sombra Blanca".
Esta historieta nos sumerge de cabeza en un juego de coronas repleto de traiciones en mitad de una era medieval, algo que recientemente se ha puesto de nuevo de moda gracias a sagas como la popular y en boca de todos Juego de Tronos.
Como la misma, nos hayamos ante una trama repleta de envidias, amor, venganza, alianzas y dobles verdades donde nadie está del lado del que dice estar y ningún personaje es totalmente fiel a un ideal que no sea el mismo.
El rey Benedek se encuentra a las puertas de la muerte desde que fue envenenado hace años. Postrado en su cama, el monarca cadáver continúa reinando mientras todos los aspirantes a su trono esperan como carroñeros su defunción.
Su heredero, el príncipe Mozes, desaparece raptado por la apodada "Bestia sin Nombre", un mito popular de estas tierras que parece aparecer en el momento más adecuado para los pretendientes al trono.
Con su desaparición y supuesta muerte, el avispero se agita y los viejos rencores vuelven a avivarse con todos los posibles herederos al trono reapareciendo para postular por el cargo soberano.
Sin embargo, sin cadáver del príncipe él continúa siendo el heredero, por lo que el consejero del rey da orden de una caza de la bestia y recuperación del príncipe que implica a todos los que aspiran al trono.
Sin embargo, desde luego esta propuesta no servirá para apaciguar las agitadas aguas. Lejos de ello, solo provocará que los posibles herederos comiencen a confabular entre ellos para reducir los posibles aspirantes.
Pero mientras los traicioneros juegos para adquirir la corona de Benedek se desarrollan, otros participantes de los que nadie tiene constancia trabajan en las sombras con su propia agenda, incluyendo al propio príncipe Mozes, que aun con vida es guiado hacia el lugar más impensable para cumplir los objetivos de gente que le son totalmente desconocidos.
Como podéis ver, los autores nos proponen una turbulenta trama en la que un montón de buitres luchan por los huesos de un reino sin importar a quién deben apuñalar por la espalda para lograr sus objetivos; un desarrollo complicado por el que nos guía Ozaman con el definido trazo de Carrion, que nos deleita con un arte de trazo muy marcado adornado con unos colores bastante diferentes de a lo que estamos acostumbrados.
Una novela gráfica repleta de personajes sin escrúpulos y dotada de una inesperada fantasía con la que sus creadores nos sumergen en su mundo sangriento y despiadado.
