Cómic: review de "El Canto de los Sables" [Yermo Ediciones].

Entre las novedades del pasado mes de enero 2014, "Yermo Ediciones" presentaba "El Canto de los Sables", todo un osado gesto en el ambiente comercial de la novela gráfica de este país.

Con guión de Antoine Ozanam y dibujo de Tentacle Eye, nos brindan este cartoné de 136 páginas que rompen con casi todo lo visto en las librerías especializadas. Y para cerciorarnos de ello solo hay que echarle un rápido vistazo a cualquiera de sus páginas interiores.

El Canto de los Sables nos narra una de esas clásicas historias de orgullo y honor situadas en el Asia feudal a las que estamos tan acostumbrados. Sin embargo, por una vez (y esperamos que se repita), Antoine Ozanam nos saca del más que trillado Japón para situarnos entre los guerreros mandarines de una China del siglo XIX que se debate entre lo viejo y lo nuevo, aportando una bocanada de aire fresco al género.

En semejante contexto ubica la historia de So-Eyon, un guerrero leal a un rey loco, encadenado por sus obligaciones y su enferma esposa a una vida de obediencia sanguinaria. Maestro en el arte de la muerte, So-Eyon reivindicará su lealtad ciegamente una y otra vez aun frente al heredero de su loco emperador, sin importarle sumergir toda su vida en un torbellino de sangre.

No obstante, su obediencia ciega se verá rechazada por su esposa, que tomando una drástica decisión ante una descabellada orden de su rey, aportará un giro a la vida de So-Eyon sobre la que girará toda nuestra historia.

Con una narrativa que evade lo tradicional para enfocarse más en un haiku de viñetas y escasas palabras, Ozanam nos relata esta cruel historia con un toque de originalidad al que pocas veces tenemos acceso.

Por otro lado, el arte de Tentacle Eye es un ingrediente absolutamente necesario para que esta historia tenga el peso y drama que trata de transmitirnos.

Haciendo gala de pinceladas cromáticas y una imaginación desbordada, Tentacle Eye es capaz de trasladarnos entre una marea de sangre hasta las escenas más delicadas o de decapitaciones a abrazos con una extraña suavidad de la que pocos autores pueden hacer gala.

Los colores, cambiando de cromas cálidos a fríos intermitentemente, e incluso mezclandolos cuando es necesario, Tentacle repleta nuestros ojos de escenas impactantes que acentúan esta historia sobre hombres leales, hombres locos y necesidad de poder.

Una historia muy diferente que enamorará a todos los que adoráis las historias en las que el honor y la lealtad se anteponen al juicio.