Cine: El ataque del tiburón de dos cabezas (review)

Este sábado pudimos disfrutar del bodrio del mes/año: El ataque del tiburón de dos cabezas (2012), responsabilidad de un tal Christopher Ray que nos presenta otra de esas películas que sin dudas están echas a posta para ser malas.


La mera visión de su portada ya casi supone un tumor retinal con el fatídico photoshopeo realizado, pero al ver en cartel a la propia Carmen Electra descubrimos que efectivamente, su guión (si alguna vez lo tuvo) está condenado. Ojito al trailer.



Se ha cagado la perra. Este film de terror esta a la altura de cosas como Tiburón contra Crocosaurio (del mismo director) y otras obras maestras del cine Z.


Sublime. Su historia, un grupo de estudiantes de edades dispares de... intuyo carnet de patrón de barco pero no me hagáis mucho caso, terminan en una isla que se derrumba sola (o por culpa los coletazos del malvado tiburón bicéfalo) a causa de una avería en su barco y tratan de sobrevivir como pueden frente a este terrible monstruo marino (risas).


A todo esto que Carmen Electra saca pechamen y la masacre se lía entre los estudiantes hormonados, cayendo víctimas de las maneras más estúpidas bajo el depredador definitivo (más risas). Todo aderezado con gore gratuito, efectos especiales de pena y unas actuaciones más malas que las de los anuncios de kinder sorpresa.


Fijaos en el realismo de ese escualo. La película os sorprenderá con sus explosiones de bidones de gasolina por combustión espontanea, sus teorías científicas sobre tiburones y supersensibilidad a campos magnéticos y tsunamis absurdos salidos de la nada.

Alucinante.

Si apreciáis vuestro cerebro, no la veáis.